jueves, 4 de agosto de 2011

Barajar y dar de nuevo


“A mí las barajas me gustan más que las mujeres, es lo que más me gusta en la vida; pócker, chinchón, truco, siete y medio, lo que sea… en este mismo tren, hace treinta años atrás, íbamos con los muchachos hasta Retiro jugando al truco; era una fiesta, dos iban sentados y dos parados, nos matábamos de risa; la gente nos miraba porque se divertía con nosotros- Estaba ese tipo que era bancario, te acordás? Buena pilcha, siempre impecable, no usaba el auto, para venir a jugar al truco con nosotros; tuvo mala suerte pobre… le faltan tres años para jubilarse y le ofrecieron un arreglo, ciento veinte mil dólares le dieron, pero no se puede jubilar.
Yo una vez al año, mirá lo que te digo, una vez al año me gusta ir al casino; mi mujer me pregunta cuánta plata vas a depositar, no me dice cuánto vas a ganar o a perder, ella me pregunta cuánto voy a depositar, jejeje. A veces, gano, a veces pierdo; bah, en realidad casi siempre salgo hecho, nunca gano plata lo que se dice plata.
Una vez fui al casino de Iguazú, y estuve una hora mirando a los brasileños cómo jugaban al pócker, ellos juegan bien, y encima en Brasil no tienen casino, así que vienen para acá, y vi cómo un tipo en tres minutos de reloj perdió mil pesos. Mil pesos perdió. En tres minutos. Una locura.
Con los muchachos de la oficina, todos los primeros viernes del mes, jugábamos, pero cuando se empezó a poner más pesada la cosa, dejé de jugar con ellos, escuchame, nos estábamos sacando la plata entre compañeros de trabajo. Una cosa es que sean desconocidos, pero entre compañeros de trabajo no. Una vez uno perdió tres mil pesos, que en esa época era la mitad de un sueldo.
Ahora juego en póckerstar, que es plata virtual; ayer gané ciento setenta mil euros (guau!), pero ese es pócker abierto, a mí me gusta el cerrado, en la computadora no podés mirar a los ojos al contrincante, tenés que esperar a ver cómo juega”
Yo viajé parada hasta Retiro, les vi cara de que se bajaban el Aristóbulo del Valle y me equivoqué. Pero no me importó, en lugar de treinta minutos de sueño, gané una historia para contar.

Fer (truco, carajo!)

3 comentarios:

  1. Heredera de Roberto Arlt... Grande Fer!!!

    ResponderBorrar
  2. Hola Fer,

    Nos gustaría publicar este post en Oblogo (www.oblogo.com). Si te interesa, por favor escribime a vanesa@oblogo.com

    Saludos,
    Vanesa

    ResponderBorrar